Habrá un retroceso en Tlaquepaque, ya que existe la dictaminación del acuerdo 1257/2019/TC que tiene por objeto evaluar el Sistema Municipal Anticorrupción en el municipio de San Pedro Tlaquepaque y en su caso desaparecerlo.
Recordemos que desde noviembre del 2019 ya se tenían problemas de falta de cuórum en este Sistema Municipal por lo que se consideraba que el sistema se encontraba frenado y por supuesto que no ha funcionado como se debiera.
Gabriel Navarro Flores, en su calidad de presidente del Sistema Municipal Anticorrupción ha declarado que el Sistema se encuentra vigente, pero que efectivamente “las autoridades del Municipio no lo quieren”, por lo que es evidente que este Sistema vino a pisar callos, comenzando por la regidora presidenta de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción, que hasta noviembre del 2019 no sabía de la existencia de este Sistema.
Este Sistema Municipal Anticorrupción será evaluado por el cabildo del Municipio, pero como pregunta Gabriel Navarro Flores ¿se puede evaluar algo que no ha comenzado a funcionar? Considero que no, pero los funcionarios que no desean una piedra en el zapato harán lo propio y lo más seguro es que en la próxima sesión de cabildo se votará la desaparición.
El objeto de este Sistema Municipal Anticorrupción, según su reglamento es que las autoridades competentes prevengan, investiguen y sancionen las faltas administrativas y los hechos de corrupción de conformidad con la Ley General de Responsabilidades Administrativas y la Ley de Responsabilidades Políticas y Administrativas del Estado de Jalisco. Por lo que más que ser positivo, es un retroceso en contra de los ciudadanos de San Pedro Tlaquepaque, para señalar a sus autoridades por conductas que consideren hechos de corrupción, esto es, su derecho a hacerlo quedará hecho polvo con esta acción de desaparición del Sistema.
El Congreso del Estado de Jalisco, en junio del 2019, analizó la pertinencia y obligatoriedad de crear los Sistemas Municipales Anticorrupción en los 125 municipios, sin embargo, no se llegó a buen puerto este análisis, por lo que la creación de este sistema a nivel municipal sigue siendo a decisión de cada municipio.
Por lo pronto, Tlaquepaque es el ejemplo de mal ejemplo al dar un paso atrás al seguimiento en favor del ciudadano para prevenir, investigar y sancionar hechos de corrupción. La pregunta es ¿a quién beneficia esta decisión?