Todo comenzó el viernes 27 de abril como un hecho aislado, donde se creía que las entidades bancarias eran las culpables de los atrasos en las transferencias electrónicas monetarias por medio del Sistema Electrónico de Pagos Interbancarios (SPEI), operado, administrado y mantenido por Banco de México.
La realidad es que se trató de un ataque orquestado directamente contra BANXICO con la técnica DDoS, que se traduce como Denegación de Servicio Distribuído, por lo que al estar atacando los servidores que reciben y distribuyen las peticiones y los pagos SPEI, se atrasan y esto hace que el usuario final experimente por medio de su banco este problema.
Los últimos 3 años se han acrecentado los ataques por medio de nuestras computadoras, incluso podemos decir que nosotros mismos orquestamos estos ataques si no ponemos los cuidados necesarios. «Algunos datos dados por Kaspersky Lab indican que 41% de usuarios en México son afectados por malware propagado por USB, CDs y DVDs, lo que lo coloca como el segundo país más afectado en este sentido en Latinoamérica». Y lo que hace que nuestras computadoras sean en muchas ocasiones las causantes de estos ataques silenciosos al tener software maligno que actual por medio de nuestra máquina.
Los cuidados que debemos de seguir si somos usuario bancarios consuetudinarios son los siguientes:
- Teclear en el espacio de la dirección web nosotros mismos la dirección a la que queremos entrar
- No utilizar buscadores para encontrar nuestro banco en Internet
- Tener actualizados nuestros navegadores para Internet y utilizar los recomendados por nuestro banco
- Leer las políticas que pone nuestro banco a nuestra disposición en todo momento
- No ingresar memorias flash (USB) en nuestra computadora, si no sabemos a quien pertenece y la información que viene dentro
- Revisar constantemente, si somos usuario de Windows, nuestro archivo c:/windows/system32/drivers/etc/host para verificar que no haya cambiado con algún malware
- Instalar, actualizar y revisar constantemente nuestro antivirus.
Evitar dar datos por teléfono a personas que se hagan pasar por ejecutivos bancarios - Evitar contestar mensajes de texto pidiendo nuestros datos bancarios
- Evitar contestar correos electrónicos que pidan nuestros datos bancarios
- Revisar que en el espacio de dirección se encuentre realmente la dirección de nuestro banco, ejemplo: www.nuestrobanco.com
Tener cuidado de nuestros factores de autenticación como lo son, la llave electrónica que nos da nuestro banco, nuestro usuario y nuestra contraseña es básico, por lo que es protección de datos personales, recordemos esto siempre.